Sagrado Corazón: Recibir un Corazón de Carne

Desde el principio, Dios creó todas las cosas y toda la creación fue buena, y luego creó a la humanidad a su imagen y semejanza, dándole su propio Espíritu capaz de ver la bondad en todo lo que había creado. Con el Espíritu, Dios dio a la humanidad un corazón de carne, capaz de apreciar todas las maravillas de la creación.